De rookie a profesional
De rookie a profesional: una temporada de aprendizaje en la Fórmula E
¡Misión cumplida! Tras siete meses de exhaustiva preparación Olivia Van Dalen, Racing Host y parte del equipo CUPRA Sponsorships, logró superar con éxito su reto personal de manejar un monoplaza Gen 3 de Fórmula E. Así lo hizo el pasado 19 de julio durante el E-Prix de Fórmula E en Londres, haciendo valer todo el esfuerzo que dedicó desde que se aventuró con este desafío, siendo una apasionada del motorsport y aficionada a los karts. Gracias al apoyo del equipo ABT CUPRA FE, con los consejos de los pilotos Lucas di Grassi y Nico Müller, además del respaldo de algunos de los embajadores de CUPRA, como es el caso de Marc ter Stegen, Olivia cumplió su sueño, pasando de ser rookie a profesional.
¿Cómo fue manejar por fin un monoplaza de Fórmula E?
¡Es muy difícil expresarlo en palabras! La sensación al sentarme en el auto fue increíble y me vino a la cabeza toda la preparación de estos últimos siete meses, todos los consejos que me dieron los pilotos del equipo ABT CUPRA FE, los embajadores de CUPRA y también expertos en la materia como Jordi Gené, Xavi Serra y el Dr. Werner Tietz. Pero me impresionó mucho que en el Gen 3 estás muy pegado al suelo y que pese a la potencia que imprime el motor eléctrico, el agarre del monoplaza es excepcional. Realmente fue una experiencia súper divertida.
Seguiste y colaboraste con el equipo CUPRA ABT FE durante toda la temporada para conocer todos los secretos ¿Qué tan importante fue para ti el trabajo en equipo para completar este reto?
No podría haberlo hecho sin el apoyo y la ayuda que recibí de todo el equipo. Aprendí mucho haciendo track walks con ellos, analizando datos con los ingenieros y aprendiendo cada detalle del vehículo. Pero, sobre todo, tengo que agradecer a Lucas y Nico por todos sus consejos y explicaciones. En México, Lucas me dio pautas muy claras a seguir para llegar hasta aquí. De hecho, mi programa de entrenamiento de los últimos siete meses se basó por completo en ello: practicar karting y ponerme al volante de un TCR, entrenar cardio y fuerza, aprender a lidiar con la presión, entrenar en el simulador...
¿Cuáles fueron los principales retos a los que te enfrentaste para completar tu objetivo con éxito? ¿Y cómo los superaste?
¡La verdad es que fueron muchos! Los pilotos se someten a una preparación exhaustiva y no fue nada fácil adaptarme a ese estilo de vida, empezando por todos los entrenamientos tan exigentes de resistencia y de fuerza. Luego tuve que practicar mucho al volante para perfeccionar mi conducción y trazada. El karting me ayudó mucho a mejorar, pero después, dar el salto al CUPRA León VZ TCR fue todo un reto. Pero la clave para mí fue la perseverancia, la determinación y, sobre todo, afrontar el reto con muchas ganas y pasión.
Al final del día ¿Qué te llevas de toda esta experiencia?
Pues, de entrada, me llevo un recuerdo inolvidable y el haber podido cumplir un sueño que tengo desde que era muy pequeña. Gracias a CUPRA pude vivir un sinfín de emociones y conectar con muchas personas que no dudaron en ayudarme a lo largo de este viaje. No tengo problema en decir que, gracias a esta experiencia, 2024 ha sido el mejor año de mi vida.
¿Te ves siendo piloto profesional después de esta experiencia?
La verdad es que me encantaría. Pero durante estos meses también me di cuenta de lo intenso y exigente que es entrenar para ser piloto profesional. Además, es todo un reto compaginarlo con un trabajo a tiempo completo, pero mi viaje no se detendrá aquí y pienso seguir formándome y, quién sabe; sería un sueño representar a CUPRA en un campeonato como el de TCR.
El viaje y los desafíos de Olivia Van Dalen se pueden seguir a través de la cuenta de Instagram @CUPRA_official.